En Islandia se dispararon esta mañana varias alarmas tras la erupción volcánica del Bárdarbunga, situado al norte del glaciar Dyngjujökull. El volcán no entraba en erupción desde hace más de un siglo.
La Oficina Meteorológica de Islandia (IMO) detectó este viernes una erupción en una fisura en el norte del volcán Bárdarbunga y elevó a rojo el nivel de alerta para la aviación sobre la zona, aunque aún no ha detectado cenizas.
La erupción comenzó al norte del glaciar Dyngjujökull pasada la medianoche y cerca de dos horas y cuarenta minutos pareció que la actividad disminuía.
El temblor sísmico fue registrado por la cámara web situada en el área y también por todas las estaciones sísmicas.
El Bárdarbunga, uno de los volcanes de mayor tamaño de Islandia, está bajo un glaciar y no entra en erupción desde hace más de un siglo. La erupción de otro volcán islandés, el Eyjafjallajökull, que paralizó buena parte del tráfico aéreo europeo durante varias semanas en 2010 al extenderse la nube de ceniza por todo el continente. El problema se reprodujo a menor escala un año después con la erupción del Grimsvotn, el volcán más activo de Islandia, aunque en este caso sólo hubo restricciones parciales unos días en este país nórdico, el Reino Unido, Alemania y Escandinavia.
No obstante, tras el peligro inicial, las autoridades de Islandia han rebajado por la tarde del viernes, de roja a naranja la alerta activada tras la erupción del volcán.
La Oficina de Meteorología de Islandia ha informado en un comunicado de que, a pesar de la menor alerta, “sigue en efecto” la restricción para los vuelos “en un radio de tres millas náuticas y a 5.000 pies de altitud”.
Esta agencia ha aclarado que una pequeña erupción registrada durante la noche en un glaciar del sistema volcánico –tras la cual se elevó al máximo el nivel de alerta– no supone una amenaza para la aviación. En este sentido, no estaría produciendo cantidades considerables de humo.
Durante las últimas dos semanas se ha registrado un incremento de la actividad sísmica en el país, y el martes un terremoto de magnitud 5,7 en la escala Richter afectó al volcán Bardarbunga. La intensa actividad sísmica del mayor sistema volcánico de Islandia ha elevado las preocupaciones ante una posible erupción que podría causar una nube de polvo similar a la que provocó el volcán Eyjafjallajokull en 2010, que obligó a cerrar el espacio aéreo europeo durante seis días.